Un último chapuzón le costó la vida a José Antonio Muñoz Cortéz, de 22 años, el joven murió ahogado en la poza La Pedrera, ubicada en la parte sur de Sutiaba en la ciudad de León.
"Nosotros le decimos al maje (sujeto), el último chapuzón para que nos vayamos. Dale pues, dice él (José Antonio Muñoz Cortéz), el último. Se fue dando la vuelta nadando como perrito y nosotros miramos quien se hunde; pasa como un minuto y medio, y le digo, 'oe, no sale', le decía yo. Vengo y me introduzco para buscarlo, pero ya no se miraba, estaba verde y helada el agua, yo solo miraba las burbujas que salían", expresó Jefrey Ezequiel Urbina Rivas, quien había llegado al lugar con el fallecido.
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Según los dueños del lugar, la víctima insistió en que quería darse un baño con los dos amigos que había llegado procedente del barrio La Providencia.
Al momento del deceso, Muñoz aparentemente andaba en estado de ebriedad.
"Yo le dije a él (José Antonio Muñoz Cortéz), 'no vayas Toño, ¿qué vas a ir hacer?. Don Félix, yo voy a ir, le voy a pagar.' 'No es porque me vayas a pagar, es porque no quiero que te vaya a pasar nada'. Es que yo ando con mis amigos, yo los invité. 'Andate pues, no quiero que quedés mal' y se vino. Cuando yo estaba almorzando, el chavalo llegó corriendo: 'Don Félix fíjese que Toño no salió, andaba nadando, flotando en el agua y no volvió a salir", relata Félix Pedro Méndez.
Miembros bomberiles de la delegación de Sutiaba llegaron al lugar, sin embargo el hombre ya se encontraba sin respirar.
"Al venir, logramos visualizar que la persona occisa ya la habían sacado, ya estaba sin signos vitales", indicó el subcomandante Alejandro Acevedo, de la Dirección General de Bomberos.
El doctor de turno del Instituto de Medicina Legal (IML) y las autoridades policiales realizaron la pesquisa sobre este hecho, mientras tanto miembros de la Dirección General de Bomberos (DGB), entregaron el cuerpo a familiares para que le brindaran cristiana sepultura.
