A eso de las 11 de la mañana del miércoles el ciudadano Pedro Pablo Mejía Lozano, de 32 años -quien padecía de epilepsia– fue visto bañándose en la poza del Río Dipilto, localizada debajo del puente del barrio Sandino, quien 15 minutos después pereció.
Vecinos del sector, los cuales acudieron en socorro del bañista, afirman que al vaciar la poza observaron el cuerpo ya sin vida de Pedro Pablo Mejía Lozano y lo trasladaron a una casa vecina a la espera de las autoridades y sus familiares.
Al llamado de socorro acudieron una unidad de bomberos y una guardia de investigación de la Policía Nacional. Asimismo la alcaldesa Xiomara Tercero, junto a su equipo de trabajo y la delegada del MINSA, doctora Elba González, llegaron al lugar de la tragedia con el propósito de solidarizarse con la familia, que vive en las cercanías del Colegio Fe y Alegría en Ocotal.
José Ronaldo López, habitante del sector dijo: “Yo andaba paseando y cuando lo vi bañando le dije que tuviera mucho cuidado porque conozco su problema de epilepsia, fueron segundos cuando me metí a una casa, regresé y me dijeron unas señoras que ya no salió y corrimos varios a ayudarlo para sacarlo, tuvimos que destruir la poza”, recalcó.
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Luis David Reyes Sánchez, habitante del sector indicó que miró "la bulla, empezamos a buscar y desarmamos la poza hasta que lo encontramos en un hoyo, pero ya estaba muerto, lamentamos su muerte, él era muy popular y querido por los vecinos”, lamentó.
Pedro Pablo, originario de Ocotal, fue reportado como un paciente crónico que recibía seguimiento de parte del Ministerio de Salud. “Efectivamente era atendido en el grupo de pacientes de enfermedades crónicas, además de sus problemas de deficiencia mental le asistíamos con medicamentos por problemas de epilepsia”, anotó la doctora Elba González, delegada de MINSA en esta cabecera departamental de Nueva Segovia.
El forense de Nueva Segovia, doctor Jorge Calderón, reveló que el ciudadano no sabía nadar, según información brindada por su padre y muere por asfixia debido a sumersión. “Al parecer se introdujo a la poza desconociendo el terreno, donde al parecer había una hondonada y ya no pudo salir. No encontramos lesiones en el cráneo ni golpes en su cuerpo, únicamente su muerte se da por asfixia por sumersión o ahogamiento”, afirmó.
El cuerpo ya sin vida de Pedro Pablo Mejía Lozano, quien era conocido y muy querido por la población de Ocotal, fue trasladado por las autoridades a su casa de habitación donde sería velado y posteriormente se le daría cristiana sepultura.
Pedro Pablo Mejía Lozano se convierte en la primera víctima de la presente temporada de verano.
