En la comunidad Yolaina, que se ubica a unos ocho kilómetros al sur de la cabecera municipal de Nueva Guinea, ocurrió un hecho de sangre que dejó como resultado padre e hijo fallecidos.
Según los habitantes del lugar, quienes no quisieron revelar su identidad, las personas muertas corresponden a los nombres de Manuel Pichardo Membreño y su hijo de nombre Alfredo Pichardo Sánchez; ambos venían de "cuidar" unos frijoles ubicados a escasos metros del vertedero municipal y se disponían a llegar a su hogar, momento en que fueron sorprendidos a balazos por desconocidos.
En el lugar murió Manuel Pichardo con impactos de bala en el pecho, mientras que su hijo recibió balazos en el abdomen y costillas, el que aún con vida fue trasladado a Juigalpa, Chontales, pero lastimosamente murió en el trayecto. El cuerpo luego sería entregado a sus familiares.
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La población al conocer del hecho de sangre, de inmediato se trasladó al lugar para auxiliar a las personas que primeramente pensaban que estaban lesionadas, pero la realidad desgraciadamente era otra.
Se cree que los criminales que les quitaron la vida lo hicieron con un arma calibre de 9 milímetros.
De forma extra oficial se conoció que una persona identificada como Teodoro Mercedes Obregón huye de la justicia, mientras que Teodorito, hijo de éste; está detenido bajo investigación policial más un trabajador que no se le conoce su identidad.
Para los habitantes del lugar los fallecidos eran muy buenas personas que se dedicaban a trabajar y no se explican cuáles fueron los motivos para que les hicieran semejante ataque.
Ya los cuerpos están siendo velados en su casa de habitación, en espera de otros familiares que no viven en el municipio y para este martes en horas tempranas se les dará cristiana sepultura. Se espera el acompañamiento de familiares y amistades para darles el último adiós.
