Al fondo de un sumidero en construcción fue a quedar el jovencito Leslie Giovanni López de 16 años de edad. Él trabajaba junto a otras tres personas la mañana del lunes en la realización de dicho sumidero, quien trataba de salir para que otro ingresara a sacar tierra, hasta que resbaló y cayó nuevamente.
Según uno de sus parientes, ya estaban a punto de terminar con el hoyo para sellarlo y hacer las conexiones de su utilización. "Estaban los tres muchachos trabajando en el sumidero, se turneaban para sacar tierra y salían por unos hoyos que ellos mismos habían hecho. Leslie estaba adentro y ya venía saliendo, tenía casi la mitad del cuerpo afuera; lo que a él lo friega es que se vino con las chinelas y se resbaló. Nunca quisieron usar escaleras porque decían que era muy incómodo".
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El llamado fue hecho a Cruz Roja Nicaragüense y a los bomberos de la Dirección General, los cuales trabajaron en conjunto para rescatar a este joven del fondo del sumidero, ubicado en el barrio 30 de Mayo, de donde fue el tanque rojo una cuadra al este, en Managua.
Se procedió a ingresar a dos compañeros, uno de cada institución ya que el espacio era pequeño. Estando en el fondo se procedió a estabilizar al muchacho y a ingresar equipo especial como cuerdas, arneses y otros para poder inmovilizarlo y de esta forma sacarlo sin poner en riesgo su vida. El trabajo duró alrededor de unos treinta minutos; pero fue exitoso.
Luego de la revisión pre hospitalaria de los paramédicos, se supo que el joven no presentaba fracturas en el cuerpo, más que todo golpes, principalmente en uno de sus pies por lo que sería remitido a un centro hospitalario.
Como medida preventiva para este tipo de casos siempre es prudente usar cuerdas y escaleras para el ingreso y salida de estos lugares, evitando así accidentes como el presenciado este día.
