Para el niño Johan Barahona y su grupo de amigos, esta mañana de miércoles sería un día más de aventuras, sin embargo se llevaron tremendo susto al encontrar en un cauce en vez de un garrobo una osamenta humana.
La osamenta se encontraba dentro de un saco, lo que les llamó la atención. Al abrirlo notaron que contenía una caja pero lo que más miedo les dio fue el esqueleto humano que se encontraba dentro de la misma.
"Veníamos garrobeando (cazando garrobos) pues, encontramos eso, la curiosidad y lo abrimos. Salimos corriendo, le avisamos a mi familia, con mis primos venimos a ver qué era. Fuimos a avisar allá y la gente llamó a la policía, pero nos asustamos al primer momento que la vimos porque nunca había visto eso pues", mencionó el pequeño Johan Barahona.
El descubrimiento sorprendió a los miembros de la comunidad La Garza, ubicada en el kilómetro 36 de la carretera Masaya hacia Granada, quienes sospechaban que "fuerzas oscuras" o "magia negra" se escondían en la caja que contenía la osamenta.
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"La verdad que ahorita eso está de esperarse. Eso a mí me huele mal, aquí alguien decía que eso puede ser de alguien que está utilizando la magia negra, pero a mí que soy conocedora de un poquito de eso pues no se me hace que sea así, por las bolsitas, si fuera alguien que trabaja en magia negra hubiera utilizado bolsas de gabacha", dijo la pobladora María Téllez.
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— TN8 Nicaragua (@canaltn8) January 16, 2019
La policía de Masaya llegó al lugar junto con la médico forense, doctora Darling Putoy, quien mediante investigaciones preliminares descartó mano criminal puesto en la caja los huesos están completos y se encontraban bajo llave.
Una de las hipótesis es que amigos de lo ajeno pudieron confundir la caja con artículos como joyas y al ver que no eran más que huesos, la dejaron tirada en ese cauce, pero será la Policía Nacional que determine de dónde pudo provenir la osamenta.
