El joven Servando José Martínez Corrales la mañana del miércoles viajaba de este a oeste en una calle de Villa Reconciliación, Managua, cuando irrespetó una señal de Alto y se fue a estrellar en uno de los costados de una unidad de transporte urbano colectivo que cubre la Ruta 111.
El bus era conducido por José Francisco Zamuria Araica, quien cumplía con su recorrido normal con unas 22 personas aproximadamente, de las que dos niñas resultaron con golpes.
Servando resultó con heridas en el rostro, sin embargo omitió referirse al caso, pero testigos manifestaron que viajaba a gran velocidad tanto así que una de las ruedas delanteras se deslizó por un boulevard previo al choque. "Yo vengo bien sobre mi preferencia, venía algo lleno el bus, el muchacho venía 'arriado' (rápido), se subió a la acera, perdió el control y se vino a estrellar en mí. Él tiene la culpa por que ahí hay una señal de Alto, viajaba con una mujer pero no le pasó nada, él sí tiene heridas. De aquí del bus aquellas dos niñas están golpeadas", dijo Zamuria, quien tiene 16 años de conducir buses en la capital.
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La población se mostró asustada con el accidente puesto que en este lugar no son comunes. "Imagínese voy llegando y me encuentro esto, qué barbaridad, ese muchacho no sé si anda en buen estado pero sí venía rápido, por el golpe lo dice todo. Aquí no suceden con frecuencia los accidentes, hasta la policía viene seguido a esa esquina a garantizar el buen desplazamiento de vehículos. Quien sabe qué pasó", dijo otro testigo del accidente, quien evitó dar su nombre.
Agentes de Tránsito Nacional correspondientes al Distrito VI investigaban el accidente, mientras el vehículo sería retirado por una grúa a la delegación antes mencionada.
Para desplazarse en un vehículo por las calles de Managua se necesita pericia, precaución y mucho ojo, para así evitar que ocurran este tipo de incidentes viales.
