La noticia del cuerpo de una persona muerta dentro de una vivienda se regó como pólvora en el barrio Cristo el Rosario, exactamente del colegio del mismo nombre, dos cuadras abajo. La noticia sorprendió y entristeció a quienes conocían de cerca a Carlos García
Los vecinos cercanos dieron aviso a los agentes de la institución del orden público y familiares, quienes solicitaron el apoyo del equipo técnico de investigación de la segunda delegación policial. Te interesa: Taxista que iba compitiendo mata a motociclista y se da a la fuga Tras días de no ser visto como costumbre y un hedor que salía de la casa, llevó a sospechar que algo no andaba bien, por lo que agentes de la Policía Nacional, con ayuda de vecinos que proporcionaron las herramientas necesarias, lograron abrir la puerta. La familia solicitó la inspección dentro de la casa para descartar que la persona haya tenido una muerte violenta. "Le dije yo a un vecino: no he visto a Carlito, vamos a golpearle la puerta; y nada, pero él todo los días salía a barrer y a todos nos saludaba, nos bendecía", expresó una de las vecinas, quien prefirió omitir su nombre. "Él permanecía más que todo encerrado, no le gustaba que nadie lo visitara, en realidad como él permanecía solo, tal vez fue un infarto lo que le dio, ya estaba bastante enfermo, tenía una hernia bien grande; pero para que, el nunca se metía con nadie", añadió. En muchas ocasiones sus familiares intentaron convencerlo para que se sometiera a una operación, pero él siempre rechazó esa posibilidad, expresó una joven, familiar del fallecido. Una vez revisada la escena donde estaba el cuerpo, preliminarmente no se encontró indicios de violencia, pero a petición de la familia el cuerpo sería trasladado al Instituto de Medicina Legal. 
