La Policía Nacional presentó este jueves a dos delincuentes vinculados con una serie de delitos cometidos en Managua, en los terribles meses de terror que ocasionaron grupos desestabilizadores en Nicaragua.
El primer caso fue el del Juan Bautista Guevara Carballo, de 43 años, quien el 20 de abril de 2018, junto a grupo de delincuentes golpistas, con armas de fuego, morteros y bombas molotov, atacaron y causaron cuantiosos daños al edificio de la alcaldía municipal de Ticuantepe.
Así mismo el 23 de abril ubicaron tranque en el kilómetro 14, carretera a Masaya, cometiendo secuestros, torturas, lesiones, asaltos y abastecía a otros delincuentes de armas de fuego y municiones, utilizando motocicletas, causando terror y zozobra en la población.
Se le procesará por los delitos de terrorismo, secuestro, asalto y daños a la propiedad pública en perjuicio del Estado de Nicaragua y sociedad nicaragüense.
Los resultados de la investigación se obtuvieron a través de la denuncia de los hechos criminales, inspección e investigación de la escena de los crímenes, Peritaje Químico de Criminalística con resultados positivos: presencia de productos nitrados en dorsales del terrorista preso y declaraciones de testigos y reconocimientos de personas que identifican al terrorista Juan Bautista Guevera Carballo, como autor de los hechos criminales.
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El otro delincuente detenido es Erling Javier Obando García, de 40 años de edad, a quien procesarán por los delitos de terrorismo, secuestro, tortura, asalto y lesiones en perjuicio del Estado de Nicaragua y sociedad nicaragüense.
Erling junto a grupo de delincuentes golpistas con armas de fuego aptas para el disparo se movilizaban en motocicleta el 9 de septiembre en los alrededores del Puente a Desnivel de Rubenia, en Managua, donde atacaron con armas de fuego, tubos y cuchillos a dos ciudadanos que se transportaban en motocicleta, ocasionándoles heridas y golpes dejándolos inconscientes, destruyendo la motocicleta. Las víctimas fueron trasladadas a un centro hospitalario.
A este sujeto se le ocupó un revólver calibre 38, armas artesanales y cartuchos de escopeta. Además las investigaciones se completaron con denuncia de los hechos criminales, inspección e investigación de la escena de los crímenes, Peritaje Químico de Criminalística con resultados positivos y declaraciones de testigos y reconocimientos de personas.
La Policía Nacional continuará trabajando para detener a otros terroristas de Nicaragua.
