Acusados por los delitos de terrorismo, crimen organizado, entorpecimiento de servicios públicos, financiamiento al terrorismo, asesinato agravado, secuestro extorsivo y profanación de cadáveres; fueron llevado al juzgado noveno Distrito Penal de Audiencias, Cristian Rodrigo Fajardo Caballero de 37 años de edad, y su esposa María Adilia Peralta Cerratos, ambos principales cabecías de una peligrosa agrupación dedicada a intentar asestar un golpe de Estado, causando quemas a instituciones de Gobierno y crímenes atroces a trabajadores de instituciones.
De acuerdo al trabajo investigativo realizado por detectives encubiertos de la Dirección de Auxilio Judicial Nacional, a finales del mes de abril los acusados empiezan a realizar gestiones a organismos desde Miami, Estados Unidos, y a través de agencias de envió le empiezan a financiar considerables cantidades de dólares, con el único propósito de continuar creando caos en el país a través de tranques, asaltos crímenes y torturas.
De acuerdo a la acusación fiscal, Cristian Fajardo a quien le llamaban "El presidente", auto nombrado así por miembros de la sociedad civil y su esposa, la también auto nombrada "Primera Dama", María Adilia Peralta, eran los responsables de mantener peligrosos delincuentes en tranques de Masaya y sus municipios, así mismo tranques en la ciudad de Granada, teniendo como brazo fuerte al ahora prófugo de la justicia, sujeto originario de la ciudad de Monimbó alias Chilo, quien contrataba a las principales pintas(delincuentes) para que realizaran los atracos.
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Entre las muchas víctimas de los ahora acusados están los oficiales de Policía Rodrigo Alfredo Barrio Flores, quien fue identificado por delincuentes que se encontraban en tranques de Monimbó, al quitarle la billetera y revisar sus documentos de identidad, descubrieron era un oficial, después de torturarlo por varias horas creyendo estaba muerto, lo fueron abandonar a unos predios montosos.
La otra víctima es el oficial de Policía, Gabriel de Jesús Vado Ruíz, a quien el pasado 14 de julio fue interceptado por delincuentes ubicados en tranques a la entrada de la ciudad de Masaya, y después de golpearlo y quemar la motocicleta propiedad de la Policía Nacional, por ordenes telefónicas que dio el acusado, Cristian Rodrigo Fajardo, le asestaron dos disparos privándolo de la vida, acto seguido de acuerdo a las investigaciones, los sujetos al mejor estilo de vampiros al observar la sangre correr sobre la víctima, sacaron un cuchillo y le propinaron heridas en reiteradas ocasiones.
Por estos delitos son al menos diez los acusados que enfrentarán la justicia, el Ministerio Público cuenta con pruebas periciales y científicas que demuestran la responsabilidad de los acusados, quienes permanecen en celdas del Sistema Penitenciario Nacional, a la espera de un juicio oral y público.