Un caso de violación donde la víctima es un niño de ocho años y sus presuntos abusadores son tres adolescentes cuyas edades oscilan entre los 12 y 15 años, se reporta en un barrio aledaño al Distrito X de Managua.
El niño de iniciales A.L.G.H. confesó a su madre que cada vez que iba a la pulpería (casa de habitación de los señalados), lo sometían a todo tipo de bullying y que en reiteradas ocasiones fue obligado a golpes a ingresar al inmueble para supuestamente sufrir los abusos deshonestos.
“El día miércoles 15 (de agosto) a las 5:30 de la tarde yo lo mandé a ver un pamper a la venta. Al rato la mamá de uno de los acusados viene a decirme que encontró a mi hijo debajo de la cama en el cuarto de su hijo. Cuando yo le pregunté a mi hijo, él me dice 'mamá te lo voy a confesar, te lo voy a decir, el chavalo de la venta me intimidó, me obligó a golpes y me dijo metete para adentro, bajate el bóxer'. El niño le dice que no. 'Que te lo bajés' le dijo él y en lo que él lo iba hacer, la mamá del chavalo entró a la casa por que venía del mercado. Inmediatamente el chavalo le dice a mi niño: 'metete debajo de la cama, corré y si mi mamá te pregunta decile que te escondiste por que tu mamá te anda buscando para pegarte'. Al suceder eso mi niño agarró valor y me lo dijo todo, fue así que yo me di cuenta”, dijo la mamá de la víctima, quien además señaló que este desde haces meses se rehusaba a ir a la venta.
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A.L.G.H. es el mayor de tres hermanos. Tras la separación de sus padres vivía con su progenitor en la ciudad de Masaya. Hace aproximadamente un año empezó a vivir con su madre.
“Él llorando me dijo 'mama te voy a decir la verdad, no te voy a mentir, desde que vos me trajiste a vivir en este barrio ellos me tocaban los tres'. Dos son hermanos y uno es primo. Él me dijo que lo tocaban en la casa del chavalo mayor, que uno de ellos le agarraba su manito y a la hora que iba a gritar le tapaba la boca, que ahí no más lo lanzaba a la cama y que el otro le agarraba su cosita y se la metía en el hoyito y que a él lo lastimaba, que a el le dolía, que eso pasó en casa de Maryuri y de Lilian”, continuó la madre de la víctima, quien además refiere que recuerda muy bien que en una ocasión su hijo trató de decírselo pero que ella no le tomó importancia por la amistad que había entre ella y la madre de los señalados.
La familia de los adolescentes tomó la decisión de aislarlos del barrio, lo que no es bien visto por los vecinos. Ellos además de apoyar a la madre del niño se sienten sin esperanza alguna de que el caso marche como tiene que ser.
“Queremos que saquen a esas mujeres de aquí, hasta yo mandaba a mi nieta a esa venta y cuando la enviaba por mi desconfianza la venía a tapar. A la madre del niño tiene que ser apoyada, por que esa es una grosería la que le hicieron y todavía ellas hasta se le burlan”, dijo una vecina quien asegura que existe temor en el barrio de que la historia se repita.
“La mujer esa además de esconder a los hijos quiso apuñalar a la mamá del niño. Podrá darse cuenta usted del cinismo que tienen. Nosotros continuaremos apoyándola", dijo otra vecina que prefirió el anonimato.
El niño abusado decía que tenia miedo que lo mataran, que los chavalos esos lo tenían amenazado con hacerle algo a su madre y hermanita, señaló otra de las consultadas por Crónica TN8.
Nuestro equipo trató de conocer la otra versión del caso pero la madre de los adolescentes evitaron referirse al caso. Lo único que argumentaron es que aún el Instituto de Medicina Legal no confirma que hubo tal violación y que la madre del niño no lo cuidaba como tenía que ser.
A.L.G.H. fue enviado a casa de su padre dada la recomendación de psicólogos que lo están atendiendo. Familiares de los acusados señalan que éstos también están en un lugar seguro mientras se realizan las investigaciones.
Según el código de la niñez y la adolescencia se le aplica la privación de libertad a un adolescente cuando comete un delito de violación.
