El ex-alcalde de Mulukukú, Guillermo Dávila Lara, denunció ante medios locales que Apolonio Fargas Gómez, actual alcalde del municipio y principal sospechoso del acto terrorista en la comunidad Sislao Paraska, efectivamente fue quien organizó y perpetró el fatídico hecho que dejó el saldo de dos oficiales muertos en el cumplimiento del deber.
El hecho ocurrió el pasado 22 de abril. Dávila dice que la policía de Mulukukú tiene conocimiento de todo eso.
"El actual alcalde Apolonio Fargas Gómez fue a pedir el permiso para iniciar las primeras marchas y fue él quien puso el primer tranque en Mulukukú. El sub-comisionado Bramian Padilla le dijo que sobre él (Gómez) estaba la responsabilidad en ese momento si ocurriese un acto violento en el municipio", dijo Dávila.
Lee también: Delincuentes golpistas atacan a trabajadores de ENACAL en Villa Progreso
"A los 3 días yo (Guillermo) me integré al tranque donde se encontraba la Secretaria del Concejo, concejales y trabajadores de la municipalidad. Todo se puso cada día más tenso con los días, más violento, posterior se dio el caso de la masacre a Pueblo Nuevo. Cuando se dieron estos hechos el que estaba encargado del tranque era Pablo Úbeda", continuó el ex funcionario.
"Nosotros fuimos dándole pase poco a poco a los vehículos que venían desde Managua, luego a Úbeda se le ocurrió ir a realizar la masacre a Pueblo Nuevo, llamó a la secretaria del concejo, Jessenia Flores, para hablarle de una camioneta que le había prometido el alcalde. Ésta le contesto que no podía acceder a darle la camioneta, y lo mandó a que hablara directamente con el alcalde", afirmó Dávila.
"Pablo procedió a hablar con el alcalde y al poco tiempo la camioneta apareció en el tranque, ésta fue llevada por el chofer, quien la dejó y se fue, quedando en manos de otra persona que estaba ahí en el tranque. En la camioneta, propiedad de la alcaldía de ese municipio, andaban unos hombres armados los cuales fueron a atacar la estación de policía", acotó.
Según estas declaraciones, la participación de Úbeda en este acto era estar a la cabeza, ir a la policía para pedir permisos para hacer la marcha, con la participación de trabajadores de la alcaldía y equipos que se usaron en el tranque.
Guillermo expresa que "armas habían, no podemos tapar el sol con un dedo", a como habían armas en todos los tranques.
A continuación sus declaraciones:
