Masaya sigue sufriendo los embates de la violencia de vándalos que atacan a la población sin piedad. La noche del domingo y madrugada de lunes los ataques de los criminales provocaron la muerte de un oficial de la Policía Nacional y otro herido de bala en una de sus piernas.
El Comisionado General Ramón Avellán, jefe policial en Masaya, denunció a través de vía telefónica en Canal 4 los hechos de violencia que se han venido desarrollando en las últimas horas en este departamento por parte de estos delincuentes golpistas.
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El jefe policial precisó que este domingo, a eso de las 7:45 de la noche, grupos delincuenciales también se han dedicado al robo de vehículos, robo de motos, robos en casas y robos a los ciudadanos.
“La Policía Nacional Departamental de Masaya ha sido objeto de ataque armado, con armas de fuego, armas hechizas, morteros; y producto de este ataque falleció el compañero José Abraham Martínez de 22 años de edad y 3 años de servicio a la institución, quien falleció producto de una bala que le penetró en la parte del ojo derecho”, detalló.
Avellán señaló que todas estos agrupaciones criminales son financiadas y que reciben pagos de entre 300 a 500 córdobas por sembrar el caos. Además a los que han podido capturar se les nota que están bajo los efectos de alcohol y drogas.
Afirmó que los delincuentes están armados y que han asediado a familias inocentes en sus casas, también han atacado tiendas de comercio como Payless Shoe Source, Supermercado Palí y Claro. Así mismo han saqueado institutos como la Fiscalía General de la República, quema de la Procuraduría General de la República y parte de la Alcaldía de Masaya, más el asalto en los Juzgados contra la Violencia.
Avellán lamentó que luego que se habían logrado establecer acuerdos de paz entre pobladores, comerciantes, policía, manifestantes y teniendo a la Iglesia como mediadora; dichos acuerdos fueran quebrantados poco tiempo después de la reunión que sostuvieran a las 6:00 pm.
Señaló que los habitantes de Masaya se sentían muy bien tras esa reunión porque querían volver a la tranquilidad de la que tienen derecho, confiando en que la policía saliera a patrullar para resguardar cada sector, pero desgraciadamente los vándalos salieron nuevamente a destruir la propiedad pública y privada.
“Seguimos explorando otras posibilidades para llevar la paz, la tranquilidad, y que todos los masayas, que son muy trabajadores, puedan dedicarse a sus actividades”, expresó el jefe policial de Masaya.
