Personas violentas que solamente quieren crear caos e inestabilidad en Nicaragua, están intentando quemar y destruir alcaldías en Chinandega y Granada, además de incendiar la casa del FSLN en el municipio de La Concepción, en Masaya, según reportes que han enviado pobladores en esas zonas del país.
El asedio en los alrededores de estas oficinas municipales, así como en casas del FSLN, demuestran la intención de los bien denominados vandálicos que apuntan a mantener el clima de zozobra en las comunidades, afectando a cientos de familias que no pueden descansar tranquilamente la noche de este viernes. Se ha reportado también que los agresores han atacado a vecinos del sector.
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Los ciudadanos que provocan este daño están armados con morteros y con artefactos para incendiar cualquier inmueble, lo que significa un peligro para las personas aledañas que solo anhelan poder tener paz y sosiego en sus hogares.
Por las expresiones que se escuchan en los videos que mandan pobladores, denotan una agresividad descontrolada y unas ansias criminales por generar destrucción.
La entrada al departamento de León fue otro sitio afectado por la destrucción, ya que jóvenes prendieron fuego y botaron el Árbol de la Vida que se encuentra en ese lugar.
En esta jornada se han visto situaciones de temor en distintos puntos del país, con tranques que obstaculizan la circulación vehicular y que a la vez amenazan a cada conductor, forzándolos a que se dejen rayar los automotores, provocando una alteración al orden público.
Así mismo en el Distrito VI de Managua otro grupo de personas violentas quemaron las instalaciones de la alcaldía de este sector, sin importarles el peligro que significa un incendio de gran magnitud para los habitantes de la zona.
A esto se agrega el tema de las amenazas de saqueos que hubo en el Mercado Oriental y el Mercado Roberto Huembes, en donde los propios comerciantes se armaron con machetes, bates y tubos para no permitir que nadie llegue a robarles lo que tanto les ha costado.
El llamado se mantiene al unísono por parte de Gobierno, Conferencia Episcopal de Nicaragua, estudiantes y empresa privada para que cese todo tipo de violencia.
