Los llantos de un bebé de escasamente cuatro horas de haber venido al mundo, alertaron este miércoles a las personas que transitaban por una de las calles del barrio Beholdeen, en la ciudad de Bluefields, Caribe Sur de Nicaragua.
La ciudadana Marcela Lackwud caminaba en el andén de la calle que está detrás del colegio San José, cuando escuchó los llantos de este recién nacido. Ahí fue que empezó a buscar en conjunto con otras personas que transitaban por la zona, los cuales detectaron que los llantos venían de una pana plástica en donde se encontraba el infante cubierto con varias sábanas. La pana estaba en las gradas de una vivienda.
Lackwud relató que al momento de quitar las sábanas los llantos eran más fuertes y al final de la pana se encontraba un niño, de posible etnia creole y de sexo masculino, quien aún tenía el cordón umbilical.
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Los habitantes de la zona en conjunto con la señora que encontró al bebé, dieron parte a las autoridades policiales para que se presentaran a lo inmediato, quienes se encargaron de trasladar al niño al Hospital Regional Ernesto Sequeira Blanco.
El director del centro asistencial, Dr. Mario Méndez, manifestó que el niño se encuentra estable en la sala de neonato, en donde los galenos de turno están garantizando la salud y bienestar del niño mientras el caso pasa a manos del Ministerio de la Familia.
La Policía Nacional por tanto ahora se encuentra en la investigación del caso para dar con la madre y esclarecer los motivos por los cuales lo dejó en el abandono, así como para comenzar su debido preciso.
