El recalentamiento en el conducto de una máquina para pintar desató alarmas en los trabajadores de una agencia de publicidad ubicada en el sector de Altamira, en Managua.
Al menos 50 trabajadores de la agencia lucharon con extintores y latas de arenas para apagar el fuego, que era alimentado por botes de pinturas. El incidente se originó en el área de pintado y amenazaba con propagarse al área de secado, dentro de la misma agencia.
"Todos nos pusimos las pilas. Al mirar que agarraba fuego la valla, los compresores y las latas de pinturas, tomamos los extinguidores y comenzamos a apagarlo. Otros nos ayudaban con latas de arena; lo bueno es que la agencia cuenta con todo el equipo de seguridad para emergencia y la usamos a como se debía. En un lapso de 10 minutos teníamos controlada la situación. En todas las areas de la agencia hay extinguidores, porque sabemos que hay productos inflamables y cualquier error se puede pagar caro”, dijo un trabajador, quien no quiso brindar su identidad.
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La unidades de emergencias de las instituciones bomberiles llegaron de inmediato, pero encontraron la situación ya totalmente controlada, sin embargo, trabajaron en el peritaje para determinar cuál fue la causa que originó el incidente. “Una área de 3 por 3 fue lo combustionado. Aparentemente fue el recalentamiento en unas de las máquinas para pintar, sin embargo, procedimos a chequear la que la situación estuviera controlada. El lugar funciona como una agencia de publicidad y hay material altamente inflamable, por lo cual les hacemos la recomendación a los dueños de ese tipo de negocio, siempre contar con las medidas de seguridad”, dijo el comandante del Benemérito Cuerpo de Bomberos.
El Benemérito Cuerpo de Bomberos y la Dirección General trabajaron en el peritaje del principio de incendio para determinar cuál fue la causa y cuáles son las medidas correspondientes para un incidente similar no vuelva a ocurrir, ya que en otra ocasión los daños podrían cobrar vidas humanas. El conato de incendio ocurrió de donde fue la Antigua Vicky, 200 metros hacía el sur, en el residencial Altamira.
