Con uno de sus pies atrapados en una parrilla terminó la niña Norma Lisbeth Alegría Velázquez de trece años de edad, luego de resbalar y perder el equilibrio, mientras regresaba de la pulpería y se dirigía hacia su vivienda. El hecho tuvo lugar de los semáforos de los mil metros una cuadra al sur.
"Ella viene con dos hermanos de la venta que está aquí cerca cuando se resbaló, y lamentablemente uno de sus piecitos le quedó prensado entre los hierros de esa parrilla. A la casa nos llega a avisar uno de los que venía con ella, el otro se quedó aquí haciéndole compañía porque ella estaba llorando de miedo. Ahí no más nos dejamos venir todos a calmarla y llamar a los bomberos para que la sacaran", relataba una hermana de la niña.
A pesar que el pie de la infante es de complexión delgada, la presión ejercida por los hierros en su rodilla, no permitía que esta pudiera girar el miembro para extraerlo por si misma.
El arduo trabajo de bomberos en conjunto con miembros de rescate de Cruz Roja Nicaragüense brindó buenos resultados, pues a pesar del tiempo de demora en la labor, la pequeña fue rescatada satisfactoriamente sin empeorar su situación. La menor fue llevada en estado estable al Hospital La Mascota, pues debía descartarse una posible fractura en la parte afectada. Para este rescate fue usada maquinaria hidráulica especial para este tipo de casos.
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El buen actuar de la población fue fundamental para el trabajo, pues colaboraron con máquinas de uso personal como pulidoras para liberar tensión de los hierros que cada minuto que pasaba ponían más nerviosa a la pequeña niña.
Los habitantes de la zona dejaron claro que este tipo de accidentes no son comunes en este lugar, pero para evitar algo similar en otra ocasión, esperan que sobre esta parrilla se ponga otro tipo de soporte y no volver a vivir algo como esto.
