Tras un maratónico Juicio Oral y Público que se realizó en el Juzgado Primero Distrito Penal de Juicio, a cargo de la juez suplente doctora Luvis Gonzales, en Managua, fue declarado culpable por el delito de homicidio y robo agravado Kevin Antonio Corea.
Mientras que la persona que supuestamente colaboró en el asesinato, Francisco Vladimir Doña fue declaro "No culpable", por el delito que lo llevó a permanecer varios meses tras las rejas del Sistema Penitenciario.
Fue a través de pruebas periciales y científicas, la participación de al menos 20 testigos, que se logró demostrar la participación de uno de los acusados en este hecho. Después de ocurrido la tragedia, el pasado 21 de diciembre del año 2017, fueron capturados por la Policía del municipio San Rafael del Sur y luego trasladados por la relevancia del caso a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial Nacional, en Managua, lugar en el que el procesados Kevin contó con lujo de detalles cómo había planeado la muerte de la víctima Tomás Francisco Morales Alvarado, de 87 años de edad, quien vivía solo en su finca; pues dos de sus hijos están en Costa Rica y el mayor vive junto a su esposa e hijos a pocos kilómetros de donde habitaba.
Tres procesados por robo de un cadáver en barrio de Managua
El móvil de este crimen, según la declaración de Kevin, fue por el robo de una pistola tipo Macarof, 9mm, propiedad de la víctima, con la que días atrás había disparado a los acusados cuando estos pretendían robar en su finca, donde poseía muchas cosas de valor y la víctima Tomás (Q.E.P.D) los obligó a huir debido a los disparos preventivos que realizó al aire, evitando así fuese víctima de robo, en esa ocasión.
La representante del Ministerio Público, Lic. Borges, dijo que el día que ocurrieron los hechos, el 21 de diciembre a eso de las 2 de la tarde, ambos acusados se encontraban ingiriendo licor cerca al cementerio de San Bartolo y comentaban que luego irían donde "el viejo hp y después de quitarle el arma lo matarían", palabras que fueron escuchadas por uno de los testigos que después de contarlas a detectives policiales lo dijo bajo promesa de Ley ante la judicial, testigo que fue propuesto por la Fiscalía.
Los abogados defensores dijeron a la juez que sus clientes son inocentes, personas muy trabajadoras, sin antecedentes penales. El día de los hechos se encontraban trabajando, vendiendo carbón y por la tarde, después de haber trabajado, llegaron a sus casas, se fueron a tomar licor y estuvieron en compañía de otras personas. Aducen que no se explican el porqué ahora los implican en este hecho, aunque al acusado Kevin Antonio le encontraron el arma propiedad de la víctima; este por medio de su abogado defensor pidió la palabra y dijo que la pistola se la encontró en la calle y la tomó para después entregársela a la Policía y evitarse problemas, palabras que no convencieron a la juez.
Bajo derecho de ley, de acuerdo a lo establecido en el Código Procesal Penal, la juez dio el fallo de culpabilidad para Kevin, para quien el Ministerio Público pidió 7 años por el delito de robo agravado y 10 años por el de homicidio, por lo que la juez dijo se pronunciará a finales del mes en curso, para dar lectura de sentencia condenatoria. La judicial ordenó para el otro acusado la pronta libertad del Sistema Penitenciario Nacional.