En el juzgado cuarto distrito penal de juicio a cargo del juez Carlos Silva Pedrosa, se realizó lectura de sentencia condenatoria a los chinandeganos José Ramón López Estrada y Pedro José Martínez Moyá, por el delito de tráfico de migrantes.
Ambos señalados, fueron capturados tras un arduo trabajo investigativo realizado por oficiales de la Dirección de Inteligencia Nacional de la Policía, cuando abordo de un camión color blanco trasportaban alrededor de 15 personas entre ellos niños. Al pasar por el municipio de San Rafael del Sur fueron detenidos gracias a un retén que tenían las autoridades, logrando trasladarlos hasta la Dirección de Auxilio Judicial Nacional, desarticulando de esta manera a la agrupación compuesta por estos dos ciudadanos, que realizaban cobros de hasta $1,500 dólares para el traslado de migrantes a distintas fronteras de nuestro país para llevarlos luego, según la investigación, hasta los Estados Unidos.
Durante el juicio oral y público realizado el pasado nueve de febrero del año en curso, el juez Carlos Silva Pedrosa, al encontrar suficientes elementos probatorios y periciales dados a conocer por detectives de la Policía Nacional ante el Ministerio Público.
La jsticia los encontró culpables por este delito en el que se puso en riesgo la vida de todos los transportados quienes luego fueron puestos a la orden de Migración y Extranjeria.
En la lectura de sentencia condenatoria, el juez les impuso la pena de 7 años de cárcel, debiendo cumplirla en el Sistema Penitenciario Nacional, hasta la fecha del 7 de diciembre del año 2023 más una multa impuesta de 34,834 córdobas, dinero que deberá ser pagado en el tiempo orientado por el judicial.
Otra de las medidas dadas a conocer por el juez, fue la ocupación del camión de barandas color blanco, además de una lancha acuática, utilizada para el ilícito, pues era el medio de transporte que estos utilizaban para trasladar a los migrantes.
De está manera queda demostrado el castigo duro que da la justicia nicaragüense ante delitos como estos.
