Familiares de la jovencita de 18 años que fue encontrada fallecida la noche del domingo en las costas de Casares, frente a la quinta Costa del Mar, en Carazo, descubrieron hoy lunes que esta joven había sido estrangulada y golpeada.
Ana Carolina Granera García es la ahora occisa y por la cual la madre y hermanos esperan que se haga justicia, luego que el dictamen médico legal indicara la forma horrorosa cómo perdió la vida. Dicho dictamen dice lo siguiente: "causas de la muerte hemorragia craneal + asfixia, trauma cráneoencefalico + asfixia , estrangulación a mano", descartando en este caso que la muerte haya sido por sumersión.
La joven presentaba múltiples golpes en la cara y la cabeza, además al contorno de su cuello habían signos de haber sido asfixiada, información que fue proporcionada a la familia de la víctima en el Instituto de Medicina Legal.
Familiares piden una exhaustiva investigación
Ana Carolina había salido el pasado sábado a eso de las siete de la mañana rumbo al colegio, desde ese día según familiares ya no la volvieron a ver ni saber de ella, es por eso que al ver que no regresó como siempre lo hacía a las cinco de la tarde, la madre decidió poner la denuncia en la estación policial de San Marcos, pero fue hasta este domingo a eso de las nueve de la noche que fueron informados que se movilizaran a reconocer si la joven encontrada muerta en las costas de Casares se trataba de su hija, confirmando que en efecto así era.
La madre de la joven, doña Martha Lorena García, afirma que desde que llegó a la estación policial de Diriamba a reconocer el cuerpo miró algo extraño, pues presentaba muchos golpes en su cara lo que le hizo pensar que algo había pasado. "A mi hija la mataron, ella era una Niña que no me daba problema, estudiaba los sábados en el (colegio) Manuel Hernández en Jinotepe y éste era su último año pues se bachilleraba el 2 de noviembre. Yo pienso que a mi hija la estrangularon y luego la tiraron al mar. Quiero que busquen al culpable o los culpables porque ella era bien aplicada, iba bien en clases y no salía, de la escuela a su casa, ni teléfono tenía", dijo entre llantos la madre de Ana.
La víctima habitaba en el barrio María Auxiliadora segunda calle en San Marcos, donde toda la población se encuentra consternada ante este caso que alerta a padres de familia a vigilar de cerca a sus hijos para ver qué tipo de amistades tienen en su entorno.
En la humilde vivienda se encuentran amigos y familiares de la víctima donde se estará velando y mañana será sepultada.