El ciudadano José Geovanny Roque, de aproximadamente 30 años de edad, murió víctima de la explosión de una bomba de pesca artesanal que manipulaba en su casa de habitación, ubicada en Corinto, Chinandega.
Algunos pobladores aseguraron haber escuchado la explosión después de 7:00 de la noche, "pensé que algún contenedor se había caído del camión, pero no era así", manifestó Francisco Hernández.
La escena que se puede apreciar en el lugar es perturbadora, el cuerpo de la víctima fue partido en dos y sus partes internas quedaron esparcidas en el lugar. Supuestamente, la bomba sería utilizada en la pesca ilegal.
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Algunos vecinos indican que el fallecido provocó la explosión de la bomba artesanal tras una fuerte discusión con su pareja, serán las autoridades quienes hagan el señalamiento de las causas del hecho. La Guardia Operativa llegó al barrio San Martín, donde detectives de la Dirección de Auxilio Judicial, DAJ, indagaron con vecinos y familiares para conocer mayores datos del suceso.
José Geovanny Roque fue visto por última vez durante la faena de la tarde del lunes. En los últimos meses los grupos ambientalistas de Chinandega han divulgado campañas en contra de la fabricación y uso de este tipo de explosivos nocivos para el medio ambiente y los recursos naturales marino costeros en el Pacífico de Nicaragua, donde se han registrado hechos lamentables como este. Solo en Corinto se han reportado cuatro casos similares.
Félix Tomás lamentó que aún se estén reportando estos incidentes que ponen en riesgo las vidas de las familias del Puerto, "pedimos a las autoridades de la Naval y Policía que apliquen con rigor la Ley de Armas porque hay quienes se están dedicando a la fabricación, venta y uso de este explosivo que ha cobrado muchas vidas", expresó.
