En las inmediaciones de la escuela María Mazzarello, en el barrio Altagracia de Managua, ocurrió esta mañana de martes un accidente de tránsito en el que resultó lesionado el motociclista Vladimir Orozco, de 27 años aproximadamente.
Dicho accidente no ocurrió por exceso de velocidad sino por imprudencia cometida por parte del conductor de un vehículo al abrir su puerta y no percatarse que venía el motociclista, quien se estrelló con el automotor.
La identidad del conductor no se logró conocer en el momento, ya que una vez que cometió la infracción se ocultó en el interior del colegio, lo que no fue muy bien visto por testigos, asegurando que actuó inhumanamente al dejar al lesionado a su suerte sobre el pavimento y quejándose de dolor.
El motorizado se desempeña como ejecutivo de ventas de una empresa telefónica y vende recargas en las pulperías de Managua. Precisamente a realizar una venta iba cuando sucedió el hecho.
Pobladores aprovechando nuestro medio argumentaron que los conductores abusan de los límites de velocidad establecidos, aún cuando tienen dos retenedores de velocidad y están conscientes que estudiantes entran y salen del colegio en horas habituales.
Un equipo de Cruz Roja Nicaragüense atendió al lesionado y lo trasladó a un hospital, mientras sus compañeros de trabajo se hacieron carga de las diligencias correspondientes. Así mismo el dinero ganado de la mañana fue retirado del lugar por temor a que amigos de lo ajeno aprovecharan lo ocurrido e hicieran de las suyas.
La dirección de Tránsito de la Policía Nacional del Distrito III de la capital de Nicaragua investiga el caso y determinará el grado de responsabilidad de ambos conductores.
La institución del orden mantiene los planes operativos para evitar accidentes de tránsito en el país, buscando acabar con la epidemia que arrebata la vida a muchos nicaragüenses.
