Esta mañana de jueves los pobladores y vecinos habitante del barrio Sandino, en Jinotega, sospecharon que una persona estaba sin vida en el interior de una vivienda por lo cual echaron un vistazo y miraron el cuerpo de un anciano en el piso. Inmediatamente se avisó a las autoridades más cercanas.
Al lugar se trasladó el cuerpo de bomberos a cargo del subcomandante Jorge Vásquez para realizar las debidas prácticas para la asistencia de este anciano, el cual ya estaba sin vida. De forma seguida se presentó una guardia operativa conformada por detectives, peritos, investigadores y Medicina Legal para determinar la causa de la muerte de este señor.
Según el Instituto de Medicina Legal el señor de nombre Bartolo Padilla de 78 años muere por un infarto y se descarta cualquier mano criminal.
El anciano es originario de la ciudad de León, al occidente de Nicaragua y según los vecinos ningún familiar lo ha visitado durante los tres años que él alquiló la casa de doña Maria Zeledón, quien argumenta que este anciano todas las mañanas se levantaba a beber café con ella y que su pasión era escuchar los juegos de las brumas de Jinotega.
El cuerpo va a aser velado donde se encontró, exactamente en el barrio Sandino, tercera calle.
Según la población este un caso poco común en este sector ya que el cuerpo estaba con un olor muy desagradable como si él ya tuviera varios días de haber muerto.
Otro caso similar
En febrero, en la comunidad El Pelón, a unos 20 kilómetros al norte de Jinotega, dos personas decidieron darse un chapuzón en la "poza" llamada El Recodo, pero uno de ellos no salió con vida.
El nombre de la víctima mortal es Cástulo Vásquez de 65 años de edad, habitante de ese sector.
Su acompañante de nombre Eddy López argumenta que él advirtió que no se metiera porque "andaba de goma", pero él no hizo caso.
Al lugar se presentaron miembros del cuerpo de bomberos de Jinotega, realizando maniobras para poder extraer el cuerpo.