La madrugada de este miércoles un trágico hecho ocurrió en la microregión de Plan de Grama, a 8 kilómetros al norte del municipio de Jinotega, en donde una persona fue encontrada muerta en unos matorrales, por ello se le hizo el llamado a las autoridades para que se presentaran al lugar.
El cuerpo ya sin vida presentaba cinco machetazos en todo su cuerpo, uno de ellos en la parte del cuello con una anchura de cinco centímetros, dejándolo parcialmente decapitado.
El nombre de la persona es Wilmer Centeno Espinoza de 22 años, conocido según la población como un un delincuente de la zona, ya que hace dos añas atrás en un trifulca en los Juzgados de Wiwilí se dio a la fuga. Él estaba siendo acusado por los delitos de tráfico de estupefaciente y robo con intimidación.
En la bolsa de la parte trasera izquierda se encontró más de 200 gramos de marihuana, así mismo cartas de juegos de azar.
Según la población realizaba apuestas con el dinero que ocupaba de la venta de la marihuana.
Un cuerpo técnico de la Policía del municipio de Wiwilí se presentó en el lugar para investigar todo el caso que ocurrió exactamente en la comunidad Los Laureles, 500 varas al norte de la iglesia Bethel.
En contexto
Un caso que causó conmoción en toda Nicaragua, fue cuando para Navidad de 2016 un hombre sin mediar palabra decapitó a un jovencito de 21 años, hecho ocurrido también en una comunidad del departamento de Jinotega.
