Una humilde vivienda en el barrio José Isaías Gómez, en Managua, por poco fue consumida completamente por las llamas de un incendio, pero gracias a la oportuna presencia de miembros del Benemérito Cuerpo de Bomberos el hecho no pasó a más.
El descuido de su propietario, don Mario José Hernández Quintero de 56 años, casi lo deja en la intemperie, pues dejó este martes el fogón de su cocina encendido y las brazas originaron las llamas que rápidamente se propagaron por la vivienda de madera y zinc.
“Mi hermano dejó la cocina de leña encendida y se fue al trabajo, de repente solo miramos las llamas y mi marido junto a los vecinos lo intentaron apagar, pero mejor llamamos a los bomberos que afortunadamente vinieron a tiempo y lograron apagar el incendio”, dijo angustiada Rita Quintero.
“Gracias a Dios que los bomberos evitaron que se quemara toda la casa, solo fue unas tablas y parte de la cocina, pero si no hasta a las otras casas se hubiese pasado”, relató Janeth Quintero, hermana del dueño de la vivienda.
Afortunadamente no se reportan personas quemadas más que los daños materiales.
“Ya está controlado, se quemó parcialmente la cocina, una mesa, leña y tablas. El dueño dejó el fogón con brasas y eso inició la combustión, evitamos con prontitud de que las llamas se extendieran al resto de la casa y las viviendas vecinas”, dijo el subcomandante Francisco Reyes de la Dirección General de Bomberos.
Aprovechando la oportunidad, Reyes hizo el llamado a las familias a tomar las medidas de precaución necesarias en esta temporada de verano que van a las playas y dejan las casas solas, y así evitar incendios, además instó a dejar siempre apagadas las cocinas, bajar los breaker de la energía y las palancas de los tanques de gas.
