Dos sacerdotes fueron encontrados muertos el lunes, horas después de ser secuestrados en el estado mexicano de Veracruz.
Los dos hombres fueron raptados el domingo en la ciudad de Poza Rica, en el norte de este estado ubicado en el litoral del Golfo de México, informó la procuraduría veracruzana. Sus cuerpos fueron hallados en un campo a un costado de un camino.
Un tercer hombre secuestrado con ellos, quien se desempeñaba como su chofer, fue encontrado vivo posteriormente y está bajo protección, dijeron las autoridades.
La Conferencia del Episcopado Mexicano identificó a los individuos muertos como los sacerdotes Alejo Nabor Jiménez Juárez y José Alfredo Juárez de la Cruz. Fueron secuestrados de un barrio pobre donde laboraban.
«Externamos nuestro dolor e indignación ante la violencia ejercida contra ellos», afirmaron los obispos en un comunicado.
«En estos momentos de dolor, impotencia y tragedia provocada por la violencia, elevamos nuestra plegaria al cielo por el eterno descanso de estos hermanos nuestros, e imploramos al Señor la conversión de sus agresores; de la autoridad esperamos el esclarecimiento de los hechos y la aplicación de la justicia contra los responsables», agregaron.
El área en los alrededores de Poza Rica ha sido escenario de violencia de los cárteles de las drogas durante años, aunque no está claro por qué fueron blanco los sacerdotes.
Ya ha habido asesinatos de sacerdotes anteriormente en México, principalmente en el estado de Guerrero ubicado junto al Océano Pacífico, aunque los móviles siguen sin estar claros.