Huma Abedin, cercana asesora de la candidata presidencial estadounidense Hillary Clinton, anunció este lunes -en plena campaña- que se separará de su esposo Anthony Weiner luego de que se revelara que él envió fotografías y mensajes eróticos a otra mujer.
«Después de una larga y dolorosa reflexión y trabajo sobre mi matrimonio, he tomado la decisión de separarme de mi marido«, dijo Abedín en un comunicado.
Horas antes, el diario The New York Post publicó fotografías y mensajes de sexo explícito que el excongresista demócrata intercambió con una mujer. En uno de ellos aparece sin camisa y con el calzoncillo abultado junto a su hijo de cuatro años dormido.
«Anthony y yo seguimos siendo devotos de hacer lo que es mejor para nuestro hijo, quien es la luz de nuestra vida. Durante estos momentos difíciles, pido respeto a nuestra privacidad», afirmó Abedin, de 40 años.
Weiner, de 51 años, se vio forzado a renunciar a su banca en la Cámara de Representantes en 2011, cuando estalló un escándalo tras admitir que intercambió fotos y mensajes con contenido sexual explícito -conocidos como «sexting» en EEUU– con al menos seis mujeres.
Dos años después, Weiner fue candidato a la alcaldía de Nueva York pero la polémica resurgió y terminó por admitir, con su esposa a lado, que continuó enviando «sexting» a desconocidas bajo el alias «Carlos Danger«.
El documental «Weiner«, estrenado en mayo, hace una crónica de esa campaña y de la dura carga para Abedin.
Las nuevas revelaciones ocurren en medio de la campaña presidencial de Clinton, por lo que su rival republicano Donald Trump no esperó para aprovechar la coyuntura.
Se trata de «una decisión muy sabia» de Abedin, dijo Trump. Pero seguidamente agregó: «Temo por este país, que Hillary Clinton fue imprudente y negligente al dejar a Weiner tener tal proximidad con informaciones altamente confidenciales».
«¿Quién sabe lo que él supo y con quién habló? Es justo otro ejemplo del juicio equivocado de Hillary Clinton«, afirmó Trump en un comunicado.
Abedin trabajó en la primera campaña presidencial de Clinton en 2008 y siguió trabajando con la exprimera dama cuando asumió como secretaria de Estado.