Un sobrino del líder del cártel de Sinaloa, Ismael «El Mayo» Zambada, y otro hombre fueron asesinados a balazos el viernes en esa región del noroeste de México, informó el sábado la fiscalía local.
Édgar Juvanny Parra Zambada, de 42 años, «de ocupación comerciante de mariscos» y «sobrino de Ismael Zambada García» fue asesinado el viernes junto a otro sujeto en el barrio Las Quintas de Culiacán, capital estatal, confirmó la Procuradoría General del estado de Sinaloa en un comunicado.
El otro hombre asesinado tenía 43 años y era albañil, indicó la fiscalía.
Ambos «fueron atacados por al menos por dos sujetos, hasta el momento no identificados», señaló la fiscalía.
Ismael «El Mayo» Zambada es un discreto capo, de 68 años, del que no se tiene noticias desde que en 2010 se encontró con un afamado periodista mexicano. Las autoridades calculan que asumió el liderazgo del cártel de Sinaloa tras la recaptura de «El Chapo» en enero pasado.
Un exjefe de la DEA dijo a la AFP en marzo que el cártel de Sinaloa es el más poderoso que opera en México, y consideró que «El Mayo» es el único capo que queda de los viejos tiempos del narcotráfico mexicano, que cuenta con gran respeto al interior de ese grupo delictivo.
Versiones periodísticas señalan que «El Mayo» habría intervenido en presunta liberación de uno de los hijos del líder histórico del cártel de Sinaloa, Joaquín «El Chapo» Guzmán.
El hijo de «El Chapo», Jesús Alfredo Guzmán Salazar, de 29 años, fue secuestrado junto con otros cinco hombres la madrugada del 15 de agosto en un restaurante del balneario Puerto Vallarta, Jalisco (oeste), y habría sido liberado el 19 de agosto, según un familiar del capo que habló con la AFP bajo anonimato.
El plagio del hijo de Guzmán es atribuido por las autoridades al Cártel Jalisco Nueva Generación, que se ha convertido en uno de los grupos criminales más poderosos a grado tal que en 2015 osó derribar un helicóptero militar y su líder, Nemesio Oceguera «El Mencho», es uno de los narcotraficantes más temidos y buscados del país.
El secuestro de Jesús Alfredo Guzmán, que según expertos podría haber desatado una guerra entre narcotraficantes, se sumó a una serie presuntos ataques contra familiares del jefe del cártel de Sinaloa en dos meses, el más reciente el asesinato de dos jóvenes que, según medios, serían sus sobrinos políticos.