Autoridades del Organismo de Investigación Judicial de Costa Rica (OIJ) declaró que en apariencia el joven que cayó ayer desde un edificio de 70 metros de altura tenía estados depresivos y sospechan haya sido un suicidio.
Un menor de aproximadamente 17 años de apellido Espinoza perdió la vida tras caer del último piso de una torre de apartamentos en Rohrmoser, Pavas.
Según indicaron algunos de sus amigos que llegaron al lugar del suceso, el joven al parecer atravesaba una depresión por malos resultados en el colegio, lo que lo habría llevado a tomar esa fatal decisión.
A aproximadamente 70 metros de altura está el apartamento donde el menor llegó supuestamente a desahogar sus penas con una de sus mejores amigas a quien le confesó que sentía mucha presión por el curso lectivo.
El colegial se acercó demasiado a la baranda de seguridad de la terraza, mientras su compañera le pedía que no siguiera avanzando porque podía caer al vacío y en ese momento ocurrió la tragedia.
Amigos, de Espinoza, comentaron que desde hace algunas semanas venía mostrando actitudes depresivas, debido a que sus notas no habían sido las mejores.
Tras la caída, los gritos de desesperación de la menor (amiga del fallecido) alertaron a los vecinos, quienes dieron aviso a la Cruz Roja y demás cuerpos de emergencia, pero en la central de comunicaciones de la Cruz Roja informaron que al llegar al sitio del suceso no había nada que hacer por el adolescente.
Encontramos un muchacho con múltiples fracturas en todo el cuerpo, en apariencia producto de una caída aparatosa. De momento desconocemos las circunstancias que mediaron en el hecho porque la Fuerza Pública estuvo custodiando a la espera de OIJ, señalaron.
Los padres del colegial llegaron a la escena, desesperados por lo que sucedió, entre lágrimas ya no podían hacer nada, asimismo los compañeros del joven también estuvieron en el sitio y se mostraron consternados por la forma en que falleció.
Agentes del Organismo de Investigación Judicial realizaron el levantamiento del cadáver y lo trasladaron al Complejo de Ciencias Forenses, en San Joaquín de Flores.