Las tormentas han derribado o dañado una gran cantidad de árboles en los bosques del centro de México donde la mariposa monarca, una especie migratoria, pasa el invierno, acuerdo con especialistas.
Las tormentas de marzo causaron la pérdida de 54 hectáreas de pinos y abetos en los bosques al oeste de Ciudad de México, un área cuatro veces mayor a la afectada por la tala ilegal. En el invierno 2009-2010, lluvias intensas y deslaves causaron la pérdida de 106 hectáreas.
Dos grandes pérdidas en cinco años podrían indicar cambios en las condiciones climáticas que han permitido la supervivencia de partes de los bosques de montaña. Este año la sequía causó la pérdida de otras 6,5 hectáreas.