Un conductor sordomudo identificado como Daniel Kevin Harris, de 29 años, fue asesinado por un policía estatal en el noreste de Charlotte, Carolina del Norte, informa Daily News.
Según la fuente, las fuerzas del orden lo habrían seguido por exceso de velocidad. Luego de aparcar y salir del automóvil, los uniformados le ordenaron poner las manos en alto, pero Harris no les habría entendido, por lo que intentó comunicarse con gestos, que fueron interpretados como resistencia a la autoridad. A Harris le dispararon mortalmente en el acto.
Actualmente, la familia del fallecido recauda fondos para pagar los gastos del funeral. Con el dinero sobrante de las donaciones, los familiares pretenden crear una fundación cuyo fin será «educar a las fuerzas del orden y proveerles el entrenamiento necesario para confrontar a personas sordas«, reza el texto firmado por los allegados de la víctima en su página de financiación colectiva.
Este hecho se suma tristemente a la lista de asesinatos por las fuerzas de seguridad. Solo en 2016, los casos de ‘gatillo fácil’ en Estados Unidos ascienden a 753, según el portal Killed by Policy. En muchos de estos crímenes, los policías han matado a ciudadanos de la comunidad afroamericana, provocando la ira de la población negra. Como consecuencia, se han desatado violentas manifestaciones contra la represión policial clamando por justicia.