Las autoridades retiraron todas las órdenes de evacuación que afectaron a miles de personas, menos de una semana después de que un incendio forestal arrasó con terrenos montañosos del sur de California y consumió cientos de casas y otras construcciones.
Unas 82.000 personas tuvieron que dejar sus propiedades luego de que el fuego comenzó el martes a unos 96 kilómetros (60 millas) al este de Los Ángeles. Aunque los bomberos avanzaron gradualmente contra el incendio, las órdenes de evacuación fueron levantadas gradualmente.
La mayoría de los afectados han hallado sus viviendas intactas, pero no todos. Una evaluación preliminar de daños halló 105 casas y 216 construcciones exteriores destruidas en terrenos rurales y montañosos donde grandes tramos de tierra abierta quedaron teñidos de negro.
El incendio, que avanzó rápido y con un comportamiento errático y quemó casi 150 kilómetros cuadrados (58 millas cuadradas), está controlado al 85%. En las zonas más castigadas por las llamas, los bomberos van casa por casa para apagar cualquier foco activo y refrescar puntos calientes.
Entre quienes no pudieron volver a sus hogares estaban Johanna Santore, de 63 años, su esposo y su nieta, de 10. Su casa y casi todas sus pertenencias quedaron destruidas por las llamas. La familia estaba realizando mandados cuando se desató el incendio y no pudieron regresar para salvar sus cosas.
La prolongada sequía que afecta a California ha convertido la región en un polvorín listo para arder. Otros seis incendios seguían activos en el estado, incluyendo uno en el condado de San Luis Obispo que obligó a cerrar el histórico Hearst Castle el sábado y el domingo.
En la zona rural del condado de Santa Barbara, un fuego que arrasó 85 kilómetros cuadrados (33 millas cuadradas) y obligó a la evacuación de dos campamentos, estaba contenido al 205. En el sur de Sierra Nevada, otro foco alimentado por la abundante madera del Bosque Nacional de Secuoyas obligó a desalojar varias pequeñas aldeas.
En el norte de California, los bomberos recuperaron el domingo el control sobre el incendio que destruyó 189 viviendas. Autoridades dijeron que las llamas que afectaron a Lower Lake estaban controladas en un 95%.