El superintendente de la policía de Chicago dijo el jueves que recomendará despedir a siete policías que presentaron reportes falsos sobre la muerte a manos de agentes del adolescente negro Laquan McDonald.
El superintendente Eddie Johnson dijo en un comunicado que, luego de revisar documentos, videos y otras evidencias, ha aceptado la recomendación del inspector general de la municipalidad, de despedir a los agentes.
Evidencias indican que los policías violaron la Regla 14, que prohíbe «presentar reportes falsos, escritos u orales», dijo Johnson. Recibió el reporte del inspector general esta semana.
Johnson presentará su recomendación a la junta policial de la municipalidad, que decidirá si despide a los agentes o no.
En octubre del 2014, el agente Jason Van Dyke disparó a McDonald 16 veces. Al año siguiente, cuando un juez obligó a la municipalidad a divulgar el video policial que documentó el tiroteo, Van Dyke fue acusado de homicidio intencional. Van Dyke se ha declarado inocente.
Los reportes policiales que se divulgaron después crearon fuertes dudas sobre las declaraciones de los policías sobre el tiroteo, que parecían contradecir los hechos mostrados en el video y hacían ver a McDonald como una amenaza mayor a la que mostraba las imágenes.
El reporte del inspector general se centró en las acciones de 10 policías. Dos de estos policías se han retirado. Johnson agregó en su comunicado que está en desacuerdo con despedir a otro policía, diciendo que «no hay suficientes evidencias para probar los alegatos «.
