Con frecuencia aparecen cadáveres abandonados en bolsas plásticas, sacos de naylon, en sábanas, incluso en hamacas, pero desde hace un par de semanas han comenzado a aparecer cuerpos sin vida dentro de vehículos que tienen reporte de robo.
La mayoría de los crímenes es atribuido por las autoridades el accionar de las pandillas que privan de libertad (raptan) a sus víctimas en los lugares donde viven y luego las asesinan en otros sitios donde las dejan abandonadas.
O simplemente, ya los cuerpos sin vida son trasladados a carreteras abiertas o corredores donde son abandonados.
El último de los casos, de cadáveres dejados en el interior de vehículos, se registró el jueves 11 de agosto. Las autoridades informaron de un carro abandonado y en cuyo interior se encontraba una persona de sexo masculino.
El cadáver fue localizado en el baúl del carro que fue dejado abandonado en la carretera de Oro, en la jurisdicción del municipio de Ciudad Delgado.
La víctima no fue identificada por las autoridades, puesto que no se encontraron documentos de identidad.
El informe de las autoridades policiales salvadoreñas indica que el cuerpo tenía señales de tortura, las autoridades presumen que lo asesinaron en otro lugar y luego lo dejaron en ese sitio.
Cuatro días antes, las autoridades reportaron el hallazgo de otro cadáver de una persona de sexo masculino que contrario al primer caso abandonado en una carretera abierta, el segundo fue en el centro de San Salvador, a pocas cuadras del Cuartel Central de la Policía Nacional Civil conocido como El Castillo.
Un vehículo, con reporte de robo, fue dejado frente al mercado Tinetti al suroriente de San Salvador.
El cuerpo estaba atado de manos y pies, y estaba en posición boca abajo. Vendedores del mercado fueron quienes dieron aviso de que se observaba el cuerpo de una persona dentro del vehículo.
La víctima no fue identificada.