Cuatro menores han muerto por disparo de arma en Kansas City en los últimos seis meses, incluyendo dos niños que fallecieron el fin de semana.
La muerte de Jayden Ugwuh, de 9 años, y Montell Ross, de 8, el sábado elevó el total de homicidios en la cuidad a 67 en lo que va del año, la mayor cifra en siete años en Kansas City, y una situación que está despertando el enojo de los líderes locales.
«Simplemente ya estoy cansado de escuchar de niños siendo asesinados«, dijo el sábado el alcalde Sly James. «Tenemos personas con armas a las que no les importa dónde termina la bala».
Los tiroteos ocurrieron alrededor de la 1:30 de la madrugada el sábado, pero hasta el lunes la policía no había reportado arrestos. Una niña de 16 años que vive en la misma casa resultó herida por arma de fuego, pero se prevé que sobreviva.
Rosilyn Temple, presidente del capítulo local Mothers in Charge (Madres a Cargo), un grupo defensor de víctimas, pasó la mañana del sábado en el lugar donde ocurrieron los tiroteos, reportó el portal de noticias The Kansas City Star (http://bit.ly/2aQ6cV7 ).
«Ellos no tuvieron una oportunidad», dijo Temple, en referencia a las víctimas. «Estaban indefensos, y nos necesitaban a nosotros como comunidad para apoyarlos, cuidarlos y protegerlos. En este momento hemos fracasado».
Uno de los niños murió en el lugar y el otro en el hospital, informó la policía.
Las muertes sucedieron a unos metros de donde dos hombres murieron en un enfrentamiento a tiros en una fiesta callejera en 2013. En ese momento las autoridades dijeron que el incidente inició por un accidente menor de tráfico.
El fiscal del condado Jackson, Jean Peters Baker, dijo que lo ocurrido el sábado fue «otra tragedia absurda«.
