Al ocotaliano Obed Arquímedes Chavarría Figueroa, de 24 años, presuntamente le arrebataron la vida de dos certeros machetazos en el cuello, en medio de una discusión al calor de los tragos.
El nicaragüense laboraba como peón en una finca ubicada en el sector de Llanos Verdes de Pocosol, San Carlos, Costa Rica hasta donde había emigrado desde hace seis meses con el espíritu de mejorar sus condiciones de vida.
Aparentemente, Chavarría antes de morir se encontraba en un estadio de fútbol de la localidad tica, cuando discutió con un sujeto de apellido Polanco por asuntos de trabajo y este le descargó los dos machetazos en su humanidad, dejándolo herido de gravedad.
Mientras el ocotaliano era trasladado de urgencia a una clínica en Santa Rosa, el presunto victimario, también nicaragüense; era detenido por la Policía en las cercanías de la frontera con Nicaragua. Obed Arquímedes Chavarría Figueroa falleció en la Clínica Santa Rosa.
A primeras horas de la mañana del jueves procedente de la frontera Peñas Blancas llegó a Ocotal, Nueva Segovia el féretro del joven ocotaliano que presuntamente fue asesinado en Costa Rica el 19 de julio.
Fue gracias a una coordinación entre las autoridades municipales de Ocotal y bomberos voluntarios que el cuerpo de Obed Chavarría fue trasladado por una unidad de intervención rápida en compañía de dos hermanos y fue recibido por familiares en el cementerio de la ciudad donde se le daría cristiana sepultura.
El joven presuntamente originario del municipio de Dipilto residía en la zona tres del barrio Sandino en la ciudad de Ocotal.
A él lo mataron y no sabemos cómo, llevamos cinco días luchando en estas vueltas para poder traerlo a su tierra, dijo su hermano José Fernando Chavarría Figueroa. Mi hermano se había ido a trabajar de peón en una piñera y buscando la vida halló la muerte, lamentó.