El ministro de Justicia y Seguridad Pública de El Salvador, Mauricio Ramírez Landaverde anunció que a partir de este día entra en vigencia la segunda fase de las medidas extraordinarias en seis penales con presencia de pandillas, lo que implica que habría mayor control en sus contornos.
En este esfuerzo participarán policías, militares y custodios de centros penales. «La segunda fase de cumplimiento de las medidas extraordinarias va a representar un incremento de la operatividad donde vamos intervenir no solo el centro penal sino todo su entorno, desde ya pedimos toda la colaboración de los ciudadanos que residen en los alrededores de los penales», afirmó Ramírez Landaverde.
El anuncio implica registros a personas, vehículos y viviendas que se movilicen en los alrededores de los penales, porque podría ser sujetos de registro inesperadamente con el fin de incrementar los niveles de seguridad del país, afirmó le ministro.
Adicionalmente, continuarán las medidas que desde un inicio se impulsan como son prohibición de las visitas normales e íntimas a los reos, limitación de movimientos internos de los reos dentro de las prisiones, suspensión de traslados a otros centros, audiencias judiciales dentro de los penales.
La segunda fase tiene como propósito aumentar el bloqueo de comunicaciones de los reos con personas al exterior de los penales, tomando en cuenta que los delincuentes siempre buscan otros mecanismos para establecer contactos con sus objetivos.
Ramírez Landaverde reconoció que en la actualidad los reos ya no utilizan el celular para sus comunicaciones sino otros medios: «y para conocimiento de la comunidad jurídica del país, los defensores de muchos privados de libertad están realizando estas funciones (llevando mensajes de reos a otras personas).
Asimismo utilizan a los internos que cumplen sus condenas y quedan libres para trasladar mensajes delincuenciales al exterior de las cárceles «que por las medidas ya no son por medio citas, llamadas telefónicas u otros medios que anteriormente empleaban de mayor forma».
Sin embargo, en una requisa en el penal de Izalco, las autoridades decomisaron varios celulares y sus accesorios de funcionamiento.
El director de la Policía, Howard Cotto, manifestó en ese sentido que la Policía es fuerza de apoyo a Centros Penales pero que hay interés de los internos por seguir con celulares dentro de las prisiones pese a la obstrucción de la señal.
Aseguró que la señal en centros penales está difícil o limitada pero reconoció que haya total bloqueo de señal celular. Reconoció que en la medida que el personal de custodios y directores sean más profesionales, se cerrará por completo el ingreso de celulares a los penales y haya menos riesgo de corrupción institucional.
«Hemos encontrado en que varios abogados su principal interés no es la asistencia legal sino poder obtener información de los reos quieren comunicar hacia afuera», subrayó Cotto.