La keniana Jackline Mwende fue atacada brutalmente por su marido por no poder quedarse embarazada durante sus siete años de matrimonio. Sin embargo, los médicos habían confirmado que los problemas de fertilidad los tiene el agresor y no su esposa.
Stephen Ngila, keniano de 34 años, ha destrozado el rostro de su mujer, Jackline Mwende, de 27 años, y le ha amputado ambas manos sirviéndose de un machete. Afirma que el brutal ataque se debe a que esta no ha podido darle hijos en sus siete años de matrimonio, informa Daily Mail.
La agresión se produjo tres meses después de que la pareja se hubiera separado. Ngila regresó a su vivienda en la ciudad keniana de Machakos el pasado 24 de julio y se abalanzó sobre ella con el arma. Él me dijo: hoy es tu último día y empezó a clavarme el machete, relata Mwende, que fue inmediatamente trasladada a un hospital. Asimismo, la joven ha perdido la capacidad auditiva en un oído.
Mwend ha pedido que su marido sea encarcelado por no tener corazón y querer matarla a pesar de mi amor por él. Ngila fue detenido un día después de los hechos y actualmente permanece bajo custodia policial. El 5 de agosto será juzgado por un Tribunal.
Medios locales reportan que los médicos habían informado a Ngila de que tenía problemas de fertilidad, pero estos que podían ser paliados si accedía a recibir tratamiento. Sin embargo, este se negó a seguirlo y no se presentó a las citas con los doctores.
