Don Rosendo Tercero, habitante del Barrio Gerardo Broks, ubicado en esta ciudad segoviana, denunció públicamente que personas desalmadas dejaron abandonado a un caballo, viejo y cansado a orillas de un cauce natural.
El animalito se fracturó las costillas y algunas de sus extremidades señalaron los pobladores que transitaban por el lugar con otros caballos en los que trasladaban leña.
Según los pobladores de la zona, el caballo se desplomó de tanto trabajar, sus dueños desconsiderados iniciaron a golpearlo para que siguiera, pero no pudo más y fue cuando decidieron dejarlo abandonado en el lugar.
Al lugar llegó un equipo especial en rescate de la Dirección General de Bomberos a cargo del capitán Omar Cruz para sacarlo del agua y evitar que el animal muriera ahogado.
El oficial adujo que esta es una crueldad que hacen con los pobres animales, asimismo invitó a los dueños a que los cuiden bien hasta su muerte y que les dejen morir dignamente.
Cambiando de tema, los vecinos del barrio La Comuna, siempre en Estelí, expusieron sentirse amenazados por la presencia de un enjambre de abejas en la zona.
Al lugar llegó una brigada espacial de la Dirección General de Bomberos para atender la urgencia y se enteraron que eran abejas llamadas guitarrón, son bravas y la picadura puede provocar un shock anafiláctico grave por lo que el capitán Omar Cruz invitó a la población a tener cuidado cuando encuentre estos insectos.
El señor Pedro Antonio Espinoza, señaló que en todo momento evitaron que alguien pasara cerca de donde estaban las abejas. El hecho ocurrió muy cerca del Instituto Nacional Reino de Suecia, al noroeste de la ciudad.