El estudio difundido este sábado revela que los homicidios en emboscadas contra las fuerzas de policía en EE.UU. se han incrementado «dramáticamente» con respecto al año pasado.
Según el informe del Fondo Memorial National Law Enforcement Officers, las muertes de policías ocasionadas con armas de fuego en Estados Unidos (EE.UU.) aumentaron un 78 por ciento en el primer semestre del año en curso en comparación con el mismo período del año 2015.
Se registraron 32 casos de muerte de este tipo en lo que va de año, frente a 18 ocurridos el año pasado.
El informe que sale a la luz comprueba que el número de los ciudadanos estadounidenses que mueren o resultan heridos a manos de la policía es mucho mayor. Un estudio publicado recientemente revela que cada día, en promedio, mueren tres personas y otras 150 son tratadas en hospitales por heridas, en ambos casos causados por la policía estadounidense.
Otro estudio realizado por el Instituto de Investigación y Evaluación del Pacífico de Maryland indica que un total de 55 mil 400 personas muieron o resultaron heridas por la policía estadounidense solo el año 2012.
Sin embargo, la policía de EE.UU. es la responsable de 509 muertes por disparos en lo que va de 2016, entre ellos, 238 blancos (47 por ciento) y 123 negros (24 por ciento).
Así lo reveló un informe publicado por el diario The Washington Post, que recogió datos de noticias, medios sociales y otras fuentes, con las que determinó que del total de las víctimas 124 padecían enfermedades mentales y 35 estaban desarmadas al momento de ser abatidas.