La aviación turca bombardeó posiciones del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) en el norte de Irak y mató a veinte militantes, en la primera operación de este tipo desde el fallido golpe de estado de la semana pasada, indicó el miércoles la agencia Anadolu.
Varios F-16 del ejército atacaron el martes por la noche posiciones del PKK en la región de Hakurk, anunció la agencia progubernamental citando fuentes de seguridad.
Los altos responsables de la guerrilla kurda están refugiados en el norte de Irak.
Estos ataques llegan cinco días después del intento de golpe del viernes pasado de un sector minoritario de las Fuerzas Armadas, entre ellos varios miembros de la Fuerza Aérea.
Tras la intentona, el gobierno puso en marcha una purga en el ejército pero también en la justicia, la educación y el sector audiovisual.
El exjefe de la Fuerza Aérea, el general Akin Oztürk, fue detenido y encarcelado pero niega estar implicado en el golpe, que el gobierno atribuye a los partidarios del predicador exiliado en Estados Unidos Fetullah Gülen.