La policía alemana mató este lunes a un hombre que agredió con hacha y cuchillo a pasajeros de un tren regional cerca de Wurzburgo (sur) e hirió de gravedad a tres personas, indicó la policía local a la AFP.
Otras personas resultaron heridas levemente, según la policía, que precisó haber matado al hombre cuando intentaba huir.
«El autor es un afgano de 17 años» residente en la localidad de Ochsenfurt, vecina del lugar donde se produjo la agresión, cerca de Wurzburgo, declaró el ministro de Interior de Baviera, Joachim Hermann, a la televisión pública ARD.
«Resulta bastante probable que se trate de un atentado islamista«, declaró por su parte a la AFP un portavoz del Ministerio de Interior bávaro.
El portavoz subrayó que el agresor, un afgano de 17 años que solicitó asilo, según precisó, había gritado «Allahu Akbar» (Alá es grande) en el momento de la agresión.
La agresión se produjo a las 21H15 locales (19H15 GMT) en un tren regional que circulaba entre las ciudades bávaras de Treuchlingen y Wurzburgo.
«Poco antes de llegar a Wurzburgo, el hombre agredió a unos pasajeros con un hacha y un cuchillo«, explicó el portavoz policial. «Dejó tres heridos graves y varios heridos ligeramente«, añadió.
«El autor de los hechos logró abandonar el tren, la policía salió en su persecución, disparó contra el agresor y lo mató», precisó el portavoz sin más detalles.
En cuanto a las motivaciones del acto, «a esta hora todo es posible», se limitó a decir este portavoz policial.
En mayo pasado, un desequilibrado de 27 años cometió una agresión similar con un cuchillo, también en un tren regional del sur de Alemania, y causó un muerto y tres heridos.
La policía evocó en un primer momento la pista islamista porque el agresor gritó «Alá es grande«, antes de rectificar cuando resultó que sufría trastornos de índoles siquiátrica.