Al menos 83 personas han muerto y 19 han desaparecido en la ciudad de Fuzhou, capital de la provincia de Fujian (este de China), por el paso del tifón Nepartak, según informó hoy la agencia oficial china Xinhua.
Unos 200.000 residentes de la ciudad se han visto afectados por el tifón y cerca de 10.000 casas se han derrumbado durante la pasada semana, con unas pérdidas para la ciudad de 7.100 millones de yuanes (unos 960 millones de euros).
La zona más afectada ha sido el condado de Minqing, donde se han producido 73 muertes y 17 desapariciones, un tercio de la población resultó afectada y ha habido cortes en la electricidad y las telecomunicaciones.
El Gobierno chino anunció que tres altos cargos de esta región han sido despedidos por la «pobre respuesta» a esta catástrofe natural.
Además, informó de que se ha enviado una ayuda de 170 millones de yuanes (unos 23 millones de euros) para las áreas más afectadas.
Según los últimos datos difundidos (el pasado miércoles), desde el inicio de la temporada de lluvias que suele ser en mayo, un total de 237 personas habían fallecido, a las que se suman las 14 de estos últimos días.
El tifón llegó a la costa oriental china tras su paso por la isla de Taiwán, donde murieron tres personas, según los últimos datos publicados.