Dos de los diez peligrosos reos que lograron escaparse del penal del turístico balneario de Cancún (este de México) tras golpear a un custodio fueron recapturados la madrugada de este jueves, informó la policía del estado de Quintana Roo.
Los reos, ambos de 24 años y acusados de robo y homicidio respectivamente, fueron recapturados en el vecino estado de Yucatán, en un puesto de control carretero que conecta las ciudades de Mérida y Valladolid, indica un comunicado de la secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo, el estado al que pertenece Cancún.
«Los prófugos viajaban a bordo de un vehículo del servicio público de Playa del Carmen, Quintana Roo, cuyo conductor también fue asegurado», añade el parte.
El secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Juan Pedro Mercader, dijo a la radio local Ayuntamiento que el arresto fue realizado en las primeras horas de este jueves, pero que aún no tienen pistas de los otros ocho prófugos.
Se trata de reos «considerados de alta peligrosidad«, quienes fueron remitidos ante las autoridades de Yucatán y serán trasladados a Quintana Roo para ponerlos a disposición de las autoridades penitenciarias, precisó el funcionario a Milenio Televisión.
Uno de los reos, apodado «El Chicanito«, acumuló una sentencia de ocho años por robo y asociación delictuosa, mientras que el otro, cuyo apodo es «El Chupón«, se encuentra en proceso penal por homicidio, según las fichas divulgadas por Seguridad Pública.
Tras varias tentativas de fuga, diez reos del Centro de Reinserción Social de Cancún sometieron a golpes a un custodio y lograron escaparse del penal la noche del martes, reabriendo el debate en México sobre la crisis penitenciaria del país.
El alcaide fue suspendido mientras se realizan las investigaciones, que apuntan a que los prófugos -de entre 23 y 30 años- aprovecharon una falla en el protocolo de seguridad de esta cárcel, de la que otros dos internos se fugaron en junio.
Todos pertenecen a los «Sureños«, un grupo de la delincuencia organizada, y buscaban imponerse a otros reos del penal. Por su peligrosidad y previos intentos de escabullirse, fueron confinados a una zona especial de la cárcel.
Cancún, que tiene unos 630.000 habitantes y es el destino favorito de los turistas extranjeros que visitan México, ha quedado a salvo de los violentos enfrentamientos entre los cárteles mexicanos pero es terreno para la venta de drogas al menudeo.