Quince personas fueron detenidas desde el comienzo de las fiestas de San Fermín de Pamplona, en el norte de España, por violaciones o agresiones sexuales, anunció el martes el ayuntamiento de la localidad en un comunicado.
Desde hace años, las autoridades locales aumentan su vigilancia ante los numerosos abusos y agresiones sexuales que se producen durante estas tradicionales fiestas, en muchas ocasiones sin ser denunciadas.
Este año, desde el inicio de los sanfermines el 6 de julio, se presentaron quince denuncias y 15 personas fueron detenidas, entre ellas seis por «agresión sexual«, categoría que, en España, incluye las violaciones, señala el ayuntamiento en un comunicado.
En el código penal español, la agresión sexual se define como un atentado «contra la libertad sexual de otra persona, utilizando violencia o intimidación» mientras que el abuso sexual, que incluye los tocamientos, se limita a las acciones sin violencia ni intimidación.
Dos de los arrestados fueron detenidos sin cargos y una de las denuncias fue archivada, precisa el consistorio que lanzó una campaña «por una fiestas libres de agresiones sexuales«.
El sábado, una francesa de 22 años denunció una violación. Según la prensa española, fue violada en los baños de un aparcamiento el sábado por la noche.
De madrugada, cinco hombres habían sido detenidos por otra violación, en este caso colectiva y filmada en vídeo por los mismos agresores.
Las autoridades no precisaron si las otras dos denuncias por agresión sexual se correspondían también a violaciones.
El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, declaró el lunes sentir «mucha rabia» ante estos sucesos. Pero también añadió que podría existir «un segundo factor» que explica esta oleada de sucesos y es que «ahora las mujeres denuncian» estos hechos.
La noche del lunes, miles de personas, apoyadas por el ayuntamiento, se congregaron en las calles de Pamplona enarbolando manos de cartón rojas donde se podía leer «no es no» en protesta por estas agresiones sexuales.
En el pasado, las imágenes de algunos hombres manoseando a mujeres aprovechando el tumulto y el frenesí de la fiesta ya habían provocado indignación entre la sociedad española.
Dirigida desde 2015 por una coalición de izquierdas independentista, la alcaldía incita a las víctimas a denunciar los hechos y pide a los asistentes «mantener una actitud activa ante este tipo de agresiones».
La fiestas de San Fermín, con encierros, corridas, bailes, conciertos y grandes cantidades de alcohol y jolgorio, son de las más populares en España y atraen a cada año miles de visitantes de todo el mundo.