La justicia belga acusó de «falsa amenaza de atentado» al hombre que puso en alerta máxima a las fuerzas de seguridad con un falso cinturón de explosivos repleto de sal y galletas, indicó este miércoles la fiscalía de Bruselas.
Un juez de instrucción de Bruselas también decretó detención preventiva para este hombre de 26 años, identificado por sus iniciales como J.B., precisó la fiscalía en un comunicado.
J.B. había contactado él mismo a la policía el martes hacia las 05H30 (03H30 GMT) afirmando que había sido secuestrado y liberado cerca de un centro comercial de la capital belga «con un cinturón de explosivos que tenía que ser accionado a distancia por una tercera persona».
Las fuerzas de seguridad establecieron un importante perímetro de seguridad y se desplegaron en la zona. Con el hombre una vez detenido, el servicio de artificieros sólo le encontró un cinturón «que contenía sal y galletas».
Luego de una pesquisa en el domicilio de su madre, en donde los investigadores descubrieron «material que sirvió para fabricar el cinturón«, el sospechoso «reconoció que había inventado su secuestro», según la fiscalía.
El hombre era «conocido por la justicia por diversos hechos, inclusive algunos ligados a problemas psiquiátricos», había explicado el martes la fiscalía de Bruselas.
El pasado 22 de marzo, ataques yihadistas casi simultáneos del grupo Estado Islámico (EI) mataron a 32 personas en el aeropuerto y el metro de Bruselas.