Los fiscales están investigando a un arzobispo español por posible delito de odio debido a ciertas declaraciones suyas sobre los gays.
La fiscalía provincial de Valencia dijo el viernes que estudiaba un discurso reciente del arzobispo Antonio Cañizares, quien dijo que «poderes como el ‘imperio gay'» promueven movimientos contra la familia cristiana.
Cañizares también fustigó el feminismo y la ideología de género. Las declaraciones provocaron críticas y un grupo regional LGBT y otro medio centenar de agrupaciones presentaron una denuncia judicial.
La prensa local dice que el cardenal emitió una carta de disculpas en la que dijo que fue malinterpretado. La fiscalía tiene plazo de seis meses para decidir si la denuncia tiene méritos.
El delito de odio se castiga con hasta tres años de prisión. La oficina del arzobispo no respondió el viernes a los pedidos de declaraciones.
Cañizares, de 70 años, provocó polémicas el año pasado cuando criticó el ingreso de migrantes y refugiados en Europa. Posteriormente ofreció disculpas.
Protegido del papa emérito Benedicto XVI, Cañizares fue cesado de un puesto importante en la oficina de liturgia del Vaticano y enviado de regreso a España en 2014 por el papa Francisco.
La oficina de liturgia, que regula el oficio de la misa y los sacramentos, dio un giro conservador y tradicionalista durante el pontificado de Benedicto XVI.
