Salvadoreña lucha más de dos décadas en busca de su hijo que fue secuestrado por su padre, pero hoy la vida le cambió.
Una madre salvadoreña residente en Riverside, al norte de Los Ángeles (EE.UU.), recuperó esta semana a un hijo que fue secuestrado por su padre hace 21 años cuando tenía apenas 18 meses, y que vivía en México, informaron hoy medios locales.
Durante más de dos décadas, María Mancia estuvo en la búsqueda de su hijo, de quien solo tenía una foto conseguida de un pariente, luego de que el padre del joven desapareciera junto con él sin dejar rastro, llevándose todas las fotos del bebé.
«Pasé 21 años buscándolo sin saber nada», declaró la madre a los medios locales luego de reunirse este jueves con su hijo Steve Hernández, de 22 años.
Hernández, quien vivía en Puebla (México) sin tener idea de que su madre lo buscaba desesperadamente, fue localizado por las autoridades y ayer volvió a pisar suelo estadounidense.
El padre del joven, Valentín Hernández, luego de llevarse al niño en 1995 le dijo que su madre los había abandonado, relató Steve a los investigadores.
Según las autoridades, el padre está desaparecido y se presume que está muerto.
Luego de que la madre denunciara el secuestro del menor, la Unidad de Secuestro de Menores de la Fiscalía del Condado de San Bernardino inició una investigación que se extendió a varios estados del país.
Según informó la Fiscalía, las autoridades recibieron en febrero una pista de que el joven se encontraba en México.
Sin avisar a la madre, para no crear expectativas que no resultaran ciertas, las autoridades contactaron al joven con el argumento de que investigaban a su padre.
De esa forma los investigadores obtuvieron una muestra de ADN de Hernández que enviaron a un laboratorio, que ante la urgencia de la investigación, en dos semanas presentó un resultado favorable.
El regreso de Steve Hernández a Estados Unidos no tuvo complicaciones legales pues el joven es ciudadano estadounidense y su madre conserva el registro de nacimiento y otras pruebas, destacó la Fiscalía.
Hernández piensa quedarse a vivir en Estados Unidos con su madre quien reside en Rialto y obtener un título en abogacía, carrera que estudiaba en México.