Un despliegue policial coordinado por el Ministerio Público de Guatemala se registró este martes en Villalobos, zona 12 de Villa Nueva, en busca de los autores de una masacre familiar el pasado jueves.
El Ministerio Público coordinó el operativo este martes, para ejecutar varias capturas de personas que hayan estado involucradas en el sangriento crimen donde murió un niño de 3 años y sus abuelos.
El grupo policial que apoyó las diligencias estableció un perímetro de seguridad en Villalobos, por considerarse el área como zona roja. No se logró la captura de nadie.
Fueron tres allanamientos a inmuebles, incluido el que ocupaba la familia, explicó Jorge Aguilar, vocero de la Policía Nacional Civil.
Agregó: «La acción determinó que se encontró en los domicilios donde habitaban los abuelos, un chaleco antibalas, un machete y un cuchillo. En la vecindad se encontró seis cartuchos de escopeta y un arma de fuego».
Los investigadores policiales siguen la pista de un grupo de pandilleros y una estructura dedicada a las extorsiones, como responsables de la muerte a sangre fría de los adultos y el menor. Según Aguilar, la familia pudo estar involucrada en extorsiones y ligada al Barrio 18.
Daniel de Jesús Sacbá, de 3 años, jugaba con una bolsa de juguetes cuando las balas lo alcanzaron. En el lugar también murieron sus abuelos, José Manuel Barrios Marroquín, alias el Cholo, de 35 años; y su conviviente Zoila Esperanza Coc, 37.
El hecho se registró el pasado jueves 2 de junio en el interior de la vivienda familiar, en el asentamiento La Unión, Villalobos, zona 12 de Villa Nueva.
Investigadores precisaron el día del crimen que las tres víctimas descendían a su residencia, en una de las laderas de La Unión, allí los esperaban cuatro hombres armados que esperaron que la familia avanzara para dispararles por la espalda.
La mujer llevaba en la mano una bolsa de verduras; el niño quedó sujetando una bolsa de plástico con seis carros de juguete que recién le habían comprado.
La madre del menor, Joselyn Yanira López Sacbá, de 20 años, fue capturada cuatro horas después del ataque por asociación ilícita y obstrucción extorsiva de tránsito.
La detención se hizo afuera de la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, en la zona 3 de la capital, mientras esperaba el cadáver de su hijo.