Más de 3.000 migrantes fueron socorridos el martes frente a las costas de Libia, que con los rescatados el lunes suman 5.600 personas en estas últimas 48 horas, anunciaron los guardacostas italianos que coordinan las operaciones de emergencia.
Antes de las operaciones de esta semana, más de 34.000 personas desembarcaron en las costas italianas tras ser socorridos en el mar frente a las costas libias desde principios de año, según un recuento del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
Los guardacostas, buques de la operación europea Sophia y de la agencia europea para el control de fronteras Frontex, un barco de la oenegé SOS Méditerranée y dos remolcadores de una plataforma petrolera cercana participaron en estas operaciones de rescate.
Todos los medios posibles de la zona fueron desplegados para rescatar a las 23 embarcaciones, según los guardacostas.
Un mar tranquilo y un viento suave del sur desde hace varios días han favorecido estos flujos masivos, que han llegado hasta varios miles de personas en pocos días.
Los guardacostas italianos no precisaron la nacionalidad de los migrantes.
Desde principios de año, la mayoría de migrantes que llegan a Italia vienen del Oeste de África y del Cuerno de África.
Las autoridades italianas temían que el flujo de migrantes sirios o afganos, bloqueado tras el cierre de la ruta a través de los Balcanes, pasara por la parte central del Mediterráneo, pero hasta ahora no ha sido el caso.
«Los arribos en 2016 son casi los mismos que en 2015», declaró en Twitter Flavio di Giacomo, portavoz en Italia de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), antes del último balance de los guardacostas.