Una mujer belga que congeló a su bebé poco después del parto fue condenada el jueves a siete años de prisión por un tribunal de Aude, en el sur de Francia. El jurado popular, formado solo por mujeres, reconoció que la acusada tenía alterado el discernimiento.
Nathalie De Mey, de 32 años, reconoció durante el juicio que congeló al bebé el 2 de febrero del 2011 para «no hacerle daño».
La mujer, que ya tenía dos hijas pequeñas, explicó haber dado luz sola tras un embarazo sin supervisión y durante el cual bebió alcohol.
«Cuando me di cuenta de que estaba embarazada intenté encontrar una solución con una asistente social pero ya era demasiado tarde», explicó.
La acusada explicó como dio a luz en el baño y luego puso al bebé en el congelador, tapado con un manta.
El cuerpo fue descubierto por casualidad tres meses después por el padre de una de las otras dos hijas de la mujer.